El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha conocido, en su reunión de este miércoles, el informe de la adjudicación de Metro de Madrid para la compra a la empresa CAF de 40 nuevos trenes que se incorporarán al suburbano madrileño con una inversión total de 450 millones.
Estos convoyes, que cuentan con un periodo de producción de tres años, irán destinados principalmente a las líneas 6 (Laguna-Lucero) y 8 (Nuevos Ministerios-T4 Aeropuerto), y su entrada en servicio supondrá la retirada de los modelos más antiguos, como los de la serie 5000, según ha degranado el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García Martín, en rueda de prensa.
El consejero madrileño ha defendido que con esta operación, se garantiza, por un lado, un aumento de la capacidad de desplazamientos de todo el subterráneo; y, además, atender la demanda de la futura ampliación de la Línea 11 hasta Conde de Casal. La compra también asegura una redistribución más eficaz de los recursos con los que cuenta actualmente la compañía.
OPTIMIZACIÓN DEL CICLO DE VIDA
Asimismo, este contrato contempla el desarrollo e implantación de un programa de optimización del ciclo de vida de dichos trenes, lo que conlleva el asesoramiento y asistencia técnica para su conservación durante un periodo de 10 años.
Los trenes de Metro de Madrid tendrán un total de seis coches, con pasillos intercomunicados, cumpliendo los máximos estándares de accesibilidad, calidad y confort. Todos estarán diseñados y fabricados aplicando criterios de sostenibilidad: reducción del consumo energético, de los precios de los repuestos y de las emisiones de CO2 mediante la introducción de nuevos refrigerantes.
La segunda fase de este proyecto, que se llevará a cabo en los próximos meses, supondrá la compra de otros 40 trenes (240 coches) que se asignarán a Línea 1 entre Pinar de Chamartín y Valdecarros –la primera que inauguró el servicio de Metro en 1919–, y con un valor estimado de 518,4 millones de euros.
EUROPA PRESS