La Oficina del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid ha puesto en marcha la primera fase para la redacción del nuevo plan con una gran consulta vecinal para recabar propuestas sobre el desarrollo urbanístico equilibrado en los 21 distritos, ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
Desde que echó a rodar el pasado 5 de febrero, la oficina trabaja en el análisis de situación de la ciudad. En paralelo, ahora aborda una consulta vecinal para conocer cuál es su impresión sobre los barrios y los distritos donde viven: qué carencias perciben, qué necesidades tienen y cómo quieren que sea su entorno a medio y largo plazo.
Con esta información, la oficina se desplazará a cada distrito para trasladar los datos relacionados con vivienda, demografía, ocio, dotaciones y empleo, entre otras cuestiones, con el fin de recabar las propuestas de los ciudadanos y, más adelante, darles respuesta ofreciéndoles soluciones.
Desde este mes, la oficina realizará encuestas personales y telefónicas a los residentes de los 21 distritos para obtener un análisis preliminar de la realidad que se percibe en cada uno de ellos.
UN PROYECTO CONSENSUADO
Con la participación, tanto pública como privada, se sacará adelante un proyecto «con alto grado» de consenso que deberá fomentar la información, divulgación e intercambio de reflexiones entre todos los actores implicados para fijar los cimientos que darán vida al nuevo Plan General de Ordenación Urbana.
La oficina, cuya sede se ha implantado en el número 5 de la plaza de la Villa bajo el lema ‘Sueña Madrid’, nace como un espacio de encuentro «desde donde realizar un profundo proceso participativo donde conectar las ideas y necesidades de todos con el propósito de dar respuesta a los objetivos que tiene Madrid y que pretende resolver el nuevo PGOU».
El área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, dirigida por Borja Carabante, ha fijado tres retos a los que el nuevo PGOUM debe dar respuesta. El primero es la vivienda, para «lograr la construcción de nuevos hogares a precio asequible para que los ciudadanos puedan vivir en la capital de España y, a su vez, atraer talento».
Se une la «transformación de la ciudad para generar un nuevo espacio público más amigable y más verde y la sostenibilidad ambiental, un factor esencial de la planificación urbanística». Todo ello «manteniendo como máxima prioridad la protección del patrimonio, ya que cualquier desarrollo urbanístico que se aborde tendrá que ser respetuoso con el conjunto de bienes protegidos de la ciudad».
EUROPA PRESS