MADRID, 26 Jul. (EUROPA PRESS) –
El pívot hispano-congoleño Serge Ibaka regresará la próxima temporada al Real Madrid, donde ya jugó en los primeros meses de la campaña 2011-2012 durante el ‘lockout’ de la NBA, según anunció el conjunto blanco en un comunicado este viernes.
El interior, que ha firmado un año con el equipo madridista, disputó la última campaña en el Bayern de Múnich entrenado por Pablo Laso, después de haber militado durante 14 cursos en la NBA, donde fue el máximo taponador de la liga en dos temporadas (2011-2012 y 2012-2013), y formó parte del mejor quinteto defensivo en tres ocasiones (2012, 2013 y 2014).
Ibaka fue campeón de la NBA en 2019 en los Toronto Raptors, junto con Marc Gasol, y con Sergio Scariolo en el cuerpo técnico, y llegó a disputar otra final de la liga estadounidense en 2012 que perdió con los Oklahoma City Thunder ante los Miami Heat. Esa misma campaña había disputado los primeros meses en el equipo blanco mientras se solucionaba el conflicto ocasionado por la no renovación del convenio colectivo, que provocó que la NBA no comenzara hasta el mes de diciembre.
Además, Ibaka también fue internacional con la seleccióin española, con la que conquistó la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y también logró el título continental en el Eurobasket de Lituania de 2011.
El hispano-congoleño reforzará el juego interior del equipo blanco tras la marcha de Vincent Poirier al Anadolu Efes la próxima temporada. En la última campaña en el Bayern de Múnich promedió 11,4 puntos, 6,4 rebotes y 1,4 tapones por encuentro, destacando los 24 puntos y 13 rebotes que firmó ante la Virtus de Bolonia o los 21 tantos y 7 capturas ante el Baskonia.
El de Serge Ibaka se trata del tercer fichaje del equipo de Chus Mateo para la temporada 2024-2025, tras el base dominicano Andrés Feliz, procedente del Joventut y el escolta canadiense Xavier Rathan-Mayes, llegado del Enisey Krasnoyarsk.
El pívot señaló que para él «es como volver a casa», porque es un club que conoce y dijo que «fue fácil tomar esta decisión». «Tengo muchas ganas de volver a llevar esta camiseta y estar con ellos», expresó en unas declaraciones difundidas por la entidad madridista.
El español añadió que «físicamente» ha cambiado, pero que «como jugador» ha mejorado «muchísimo». «Esa es la diferencia entre el Ibaka de ahora y el de antes. Mi labor siempre ha sido defensiva, desde el principio de mi carrera, pero ahora he mejorado mucho en ataque. Puedo aportar también mi experiencia, porque llevo jugando baloncesto profesional desde hace 18 años», explicó.
El campeón de la NBA en 2019 apuntó que junto con Walter Tavares, gracias a «la mentalidad defensiva que tiene», pueden formar «una pareja muy importante y fuerte en Europa a nivel defensivo». El interior subrayó que ha llegado al Real Madrid «para ganar», y que le «gusta» la «presión de un equipo que ya está acostumbrado a ganar».
Ibaka ya conoce a su nuevo entrenador Chus Mateo, con el que oincidió en su breve etapa en el conjunto blanco. «He visto cómo está jugando el equipo en los últimos años, el estilo, y me encanta. Tengo muchas ganas de trabajar con él», declaró.
