MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) –
Los madrileños que este lunes han acudido a visitar el nuevo espacio de recogimiento y homenaje a las víctimas del 11M en Atocha han aplaudido este nuevo espacio que la Comunidad de Madrid inauguró este domingo en el vestíbulo de la estación, víspera del 20 aniversario de la masacre terrorista.
Curiosos, familiares de víctimas y supervivientes de los atentados han visitado el nuevo espacio de recogimiento en la estación de Atocha, justo debajo del lugar que ocupaba el monumento conmemorativo que se encontraba en superficie, y que ha sido desmontado para el desarrollo de las obras de la Línea 11 de Metro.
«Este está mucho mejor que el que pusieron la primera vez» es la opinión mayoritaria de los visitantes, que comentan entre ellos que el anterior espacio estaba «escondido» y no tenía visibilidad. Coinciden en muchos turistas que llegan a Madrid por tren ni siquiera se percataban de que estaba allí.
«He estado ahí sentada un rato y he visto que venían muchas personas con maletas y antes es que ni siquiera se veía, entonces es magnífico», ha relatado en declaraciones a Europa Press Televisión una de las personas que se ha acercado la mañana de este lunes a este nuevo espacio pocas horas después de que se abriera al público.
Esta nueva área de recogimiento ocupará una superficie total de 2.000 metros cuadrados, cuadriplicando el espacio anterior que era de 400, aunque en el día de su apertura solo son visitables 1.200 metros cuadrados.
«Lo veo más íntimo, te puedes sentar, hacer compañía», ha explicado una mujer que recientemente ha perdido a su hijo, coincidiendo con la conmemoración del Día Europeo en Memoria de las Víctimas del Terrorismo y el XX aniversario de los atentados de 2004 en Madrid.
Las paredes del mismo están pintadas de color azul cobalto, el elegido por las Asociaciones de Víctimas para este entorno, y llevan grabados los nombres de los fallecidos en el atentado del 11 de marzo del 2004 de Madrid, así como algunas de las frases que se podían leer en el monumento, ahora desmontado.
Entre ellas, fijaran mensajes como «no a la violencia»; «todos íbamos en ese tren»; «nunca os iréis del todo»; «no hay camino para la paz, la paz es el camino»; o «por todos vosotros seremos mejores». También se recogen textos en euskera, catalán inglés, francés, portugués, árabe, ucraniano, rumano, polaco, búlgaro y georgiano.
193 PUNTOS DE ILUMINACIÓN
Además, se han instalado 193 puntos de iluminación en el techo que representan a cada una de las personas que perdieron la vida en el atentado, las 192 que murieron en las explosiones y al GEO Francisco Javier Torrenteras, fallecido a causa de las heridas sufridas cuando siete autores de los atentados se suicidaron con bombas el 3 de abril de 2004 en Leganés.
«Es muy triste ver cómo suceden estos actos. Entonces, me parece que han hecho un homenaje hermoso para que las familias tengan descanso por las almas de sus seres queridos que han perdido», ha indicado otro de los visitantes.
El sentir mayoritario también apunta a la necesidad de un espacio de homenaje a las víctimas de los atentados. «Hay que hacerlo siempre y mantenerlo», apostilla un hombre. «A los que nos pasó esta desgracia, no los olvidamos», comenta una señora que perdió a su marido en los atentados de El Pozo.
«Siempre estamos recordándolo, pero eso para todos. Yo creo que para Madrid o España, este día no se olvida a nadie. Porque la que más y la que menos, pues tenemos una persona que se ha ido», añade esta familiar.
Este espacio ha contado para su diseño con la opinión de las víctimas del atentado. «Es muy importante recordarles, es muy importante tener en cuenta que somos personas que merecemos vivir, merecemos estar aquí», ha resaltado una mujer colombiana de visita en España.
Además, otros visitantes han remarcado que permite sentantarse y pasar un tiempo recordando a sus seres queridos. «Me parece que han hecho un memorial muy bonito», ha relatado otra chica, que ha indicado que es «magnífico», frente al anterior, que antes no se veía. Ha explicado que ha acudido con su madre, que resultó herida y que ha ido por primera vez a Atocha un 11 de marzo.